Ya avisó Paula Badosa que le esperaba un partido “muy táctico” ante Coco Gauff. Una vez sacudidos los nervios del estreno en el Mutua Madrid Open ante Elisabetta Cocciaretto, la española pudo enfocarse en armar un plan y ejecutarlo con la determinación suficiente como para dejar sin argumentos este sábado a la estadounidense en un Estadio Manolo Santana entregado a la causa (6-3, 6-0).

“En general estoy contenta mentalmente por como he enfocado el partido. He estado tranquila de inicio a fin y he jugado inteligente. Hoy suma mucho a nivel de confianza. En el segundo set hubo momentos difíciles porque, mentalmente, en otros partidos me había costado cerrarlos”, confiesa.

La No.42 de la WTA ha arrancado con fuerza ante la sexta favorita del cuadro, además de vigente finalista de Roland Garros, para incrementar su superioridad en la segunda manga y evitar la reacción de su rival, como sí sucedió en la anterior ronda y sellar su billete a los octavos de final del MMOPEN en apenas uno hora y diez minutos de partido.

“He intentado hacerle jugar a Gauff siempre una bola más. A veces, cuando siente que no obtiene puntos gratis, empieza a sacar peor. Y obviamente le he buscado más la zona del drive porque tiene un gran revés”, explica sobre la táctica empleada.

Ahora Badosa se medirá ahora a la vencedora del duelo entre la también española Rebeka Masarova y la griega, novena cabeza de serie, Maria Sakkari que cierra el programa de la sexta jornada de competición en la Caja Mágica.

“Creo que va a ser una batalla entre dos guerreras, dos luchadoras. Eso es lo que espero de mi próximo encuentro. Y, obviamente, espero tener de mi lado el apoyo del público y que me ayude a obtener el triunfo. Desde que vine aquí por primera vez hace ocho años, sentí que conectaba con los aficionados que son muy intensos y eso me gusta”, argumenta.

La semifinalista en la edición de 2021 está a un paso de igualar los cuartos de final alcanzados este año en los torneos de Charleston y Stuttgart sobre arcilla y eleva su listón hasta los trece triunfos en el circuito WTA por solamente seis tropiezos esta temporada.

“Partidos así me dan confianza. Antes de empezar el torneo ya dije que me veía al nivel de las mejores porque había estado muy cerca de poder vencerlas. Son pequeños detalles y me veo jugando cada vez mejor. En mi caso es más un tema mental y de confianza. Me falta tener continuidad”, concluye.