Un artista en partidos difíciles, un genio en aguantar la presión en terceros sets… Zhizheng Zhang no es sólo una apisonadora de romper records, es un maestro de la tensión. Cuatro partidos. Once sets. Siete tiebreaks. Tres partidos decididos en el desempate decisivo. Así se las gasta Zhang, te exprime, te agota y por último te remata. El jugador nacido en Shanghai se ha deshecho nada más y nada menos que de dos recientes top 10 como son Denis Shapovalov y Cameron Norrie y otro que actualmente lo es Taylor Fritzy en lo que ha supuesto la primera victoria ante un top 10 en su carrera.. Los tres han caído en la trampa del tiebreak del tercero. Soltura y veteranía frente a los mejores del mundo.

El tenis chino sonríe, es curioso que un país de tradición tenística y con la inmensidad que tiene China no haya salido ninguna figura masculina que haya destacado en el circuito. Si Na Li reinó en el tenis femenino, Zhang viene para triunfar en el masculino y en el Mutua Madrid Open ha dado un paso de gigante. El jugador chino se plantaba en Madrid siendo el primer jugador chino que rompía la barrera del top 100 pero ya no se conforma, quiere más, mucho más. Con su victoria se mete dentro de los 70 mejores del mundo, y una victoria más en La Caja Mágica supondría meterse en el top 45 del ranking ATP. Para ello deberá seguir sumando horas en pista.

El jugador de 26 años que destaca por un juego desenfadado se enfrentará a Aslan Karatsev que ayer se deshizo del segundo favorito Daniil Medvedev. “Voy a contar un secreto, jugué un partidillo de entrenamiento contra Karatsev y perdí 6-0. Tendrá que darlo todo y ser creativo, porque él es bueno”, reconoce entre risas Zhang. Si Karatsev quiere jugar las semifinales más vale que no llegue al tercer set…