No ha sido un debut fácil el de este jueves para Paula Badosa en el Mutua Madrid Open. Pero estrenarse con victoria refuerza su moral y le permite seguir en la buena línea marcada desde el inicio de la gira de tierra batida. La española ha necesitado dos horas y media de lucha para doblegar a Elisabetta Cocciaretto por 6-3, 4-6, 6-4.
“Ha sido un partido muy duro mentalmente, pero estoy contenta por la victoria y el paso adelante. Siempre intento competir aunque no tenga un buen día. Hoy no lo ha sido, pero lo he intentado hasta el final y es importante sacar partidos así”, ha confesado tras el partido.
A pesar de que la cabeza de serie No.26 tenía el encuentro muy de cara en el Estadio Manolo Santana, con set arriba y 3-1 en la segunda manga, se ha visto obligada a emplearse a fondo ante la persistencia de su rival italiana. Ahora Badosa se medirá en tercera ronda a la estadounidense, sexta favorita, Coco Gauff. La vigente finalista de Roland Garros arrancó también con victoria ante la local Irene Burillo (6-4, 6-1).
“He empezado bien y tenía el partido bajo control. Me sentía muy bien, hacía mucho calor, pero el partido cambió en minutos. Cocciaretto ha empezado a jugar y sacar mejor en unas condiciones donde siento que la bola viaja más rápido. He luchado hasta el último punto, como me caracteriza”, se ha congratulado.
Dar continuidad a los cuartos de final alcanzados en Charleston y Stuttgart sobre arcilla pasa para la semifinalista del MMOPEN en 2021 por aprovechar el factor de jugar en casa y ante su público, además del cara a cara favorable ante Gauff, con victorias en Indian Wells (2021) y San José (2022) por una única derrota en Doha (2022).
“Ante Gauff hemos jugado ya varias veces. Es una gran sacadora, juega agresivo y tiene uno de los mejores reveses del mundo. Creo que será un partido muy táctico, porque juega muy bien en tierra y será un bonito reto jugar ante ella ante mi público”, ha argumentado.
Badosa eleva así su listón hasta la docena de triunfos en el circuito WTA por seis tropiezos en un año el cual empezó con esperanzas tras llegar a semifinales en Adelaida. Una lesión en el muslo de la pierna derecha le impidió optar a la final y a disputar el primer Grand Slam del calendario en Australia. Ahora, en la Caja Mágica, la No.42 del mundo alberga esperanzas de despegar.
“Llevo unas semanas buenas y jugando mejor. He jugado con las mejores del mundo y he estado muy cerca. El nivel está ahí, son pequeños detalles y cerrar los partidos no es fácil. Me siento bien y ojalá logre cerrar alguno para que salga la Paula que quiero”, ha concluido.