Intensa, exigente, sacrificada… Asi podríamos definir la prueba que ha debido superar Carlos Alcaraz en el día de su vigésimo cumpleaños para superar a Borna Coric y plantarse en su segunda final consecutiva en Madrid. Valoraba así nada más llegar a la sala de prensa: «Ha sido duro sabíamos que iba a ser un partido duro, un gran jugador que no nos ha pillado por sorpresa porque sabíamos lo que venía y ha sido muy exigente, hemos aguantado y caído a nuestro favor.»
Con Carlos Alcaraz el margen de sorpresa empieza a ser pequeño porque cada día se supera y rompe nuevos records y es que hoy se ha convertido en el tenista con más porcentaje de victorias al llegar a los 150 partidos. Los pies en la tierra, nadie le ha regalado nada: «hay mucha gente que dice que has nacido para ser tenista, tu has nacido para eso, pero si no pones el trabajo diario, pero si no le pones las ganas de cada día si no quieres ser tenista al final por mucho que tengas ese don no llegas. Hay que juntar el talento con el trabajo, sin esforzarte en querer ser el mejor nunca vas a ser nadie», concluye el español. Es sí, por su cumpleaños ha querido tener una palabras más allá del mundo profesional: «A la vida le pido salud para mi y para los míos, creo que eso es lo mas importante y que podamos disfrutar de la vida ese es el mejor regalo y el mejor deseo que le puedo pedir».
Una de las claves que aporta estabilidad es la unidad de su equipo: «Soy una persona muy cercana y siempre me he querido rodear de profesionales, pero sobre todo que tenga con ellos buena relación a nivel personal, no solo con Juan Carlos con Abert, mi fisio, mi medico, todo mi equipo lo considero familia y para mi eso es muy importante». La vida del tenista es muy exigente y a veces solitaria y por ello Carlos le da tanta importancia: «Pasamos mucho tiempo fuera de casa y tener a esas personas muy cercanas a ti, te hacen sentirte en casa aunque estés en otro país y para mi es clave».
A pesar de su juventud tiene una capacidad de análisis que no deja de impresionar: «Este es mi segundo año en el circuito y ya voy por mi cuarta final de Masters 1000, tengo un Grand Slam, voy a pelear por mi décimo título y a veces no me paro a pensar que tengo veinte años y mi carrera acaba de empezar pero como ya he dicho yo he peleado por estar en esta situación he trabajado mucho, esto es lo que quiera de siempre y no tengo vértigo por lo que he vivido y por lo que me queda vivir».
Para terminar ha tenido momento de acordarse de Rafa Nadal que ha anunciado que no podrá jugar en Roma: «Le deseo una pronta recuperación y espero poder verle en Roland Garros al 100%. El mundo del tenis quiere verle al 100%».